MI RELATO DEL JUEVES, SIN DIRECIÓN JUEVERA

Los jóvenes y la música

Me siento incómoda por no saber y aligerar vuestro trabajo. Pero todos sabeis porqué lo he cantado a los cuatro vientos, que no tengo  el suficiente conocimiento en infomática, apenas se montar mi entrada, y la vista está. 

 Pero hoy es el dia que preparo mi escrirto  y haya o nó conductores yo voy a publicar. Eso
por lo menos tiene de bueno que el tema es libre. Hoy hablaré  de los jóvenes y su MÚSICA.
Mucha gente de ahora piensa que las músicas ensordecedoras de hoy en dia, las que ponen nuestros vecinos adolescentes a todas horas, (es cierto que se pasan cuatro pueblos, con el volúmen). Y hacen que suban los decibelios hasta niveles insostenibles que no dejan escuchar nada mas y a veces ni descansar. Y cuando pasan por nuestro lado con sus potentes CD’s, dentro del coche pensamos que són unos maleducados y unos provocadores.
las músicas tecno, ensordecen es verdad, pero lo queramos o nó, es la que ellos han elegido; la que mas se escucha, no solo en las discotecas. sinó en terrazas, en pubs y otros locales de ocio.
Recuerdo muy bién, lo inmorales y pertubadores que nuestros padres veian a los chicos  de Liverpool, al comienzo de su carrera. Todos estaban escandalizados de  sus malsonantes canciones, y aquellas vestimentas con aquelllos pelos, les descolocaba. Ha pasado el tiempo, y ahora, aquellas letras y melodias nos parecen cantos de cuna, i las vertimentas, extremadamente modosas solo sevirian para niños de Primera Comunión. Visto lo visto; ¿alguien puede asegurar, que no va a pasar lo mismo, con esta pseudo musica, que solo gusta a las nuevas generaciones, hecha especialmente por y  para gente, que se empeña en parecer poco escrupulosos en vestir y en la higiene personal?. Y que el fuerte olor a sudor llega hasta el patio de butacas?
Yo diria que es el mismo fenómeno. Pero nos cuesta cada vez más, adaptanos a las nuevas modas. Estas corrientes de musica metàlica y tecno, según dicen, hacen que los jóvenes de hoy, sientan la necesidad de consumir otras cosas mas peligrosas y criticables. Pero esto ya són higos de otro cesto. Hay que tener en cuenta, que los
gustos musicales también se han visto zarandeados, por el strés y la vida moderna,Y hay que aceptarlos, aunque sus sones, no combinen, con las leyes inducutibles de la melodia,
armonia y ritmo.