Ya hace bastante tiempo, un buen día decidí incorporar el ordenador a mi vida. De ponerme las pilas, sólo por estar al día, de no perder el tren, de continuar siendo parte de la sociedad, y del cambio constante a que es sometida. Fui a un casal del barrio, y me enseñaron a utilizar el Word Pad primero y el Word.Office a continuación. Era distraído, divertido y acto seguido, me abrieron una cuenta de correo. Ya era toda una experiencia, y me divertía jugando a los solitarios, y enviando algún mensaje con los compañeros de la clase. También hacia titulares, tarjetas de visita, etiquetas, que imprimía, y pegaba para ordenar mis cajas de fotos, de hilos y de lanas de mis labores, y hacía algunos dibujos para mis nietas. Aquella novedad, colmaba todos mis inquietudes y anhelos. Estaba tan contenta con aquellos avances, que pronto me llevaron a querer llegar más lejos y quise ver que lo que ocurriría si cogía un router y me conectaba a Internet. Por aquellos días, estaba pendiente de mi salud, que se vio bastante deteriorada. Mis huesos no me permitían casi caminar, El médico que me visitaba, y por consejo de un especialista, me dijo que había que operar, y así se hizo poco tiempo después. La recuperación, fue rápida, y exitosa y enseguida puse las pilas para correr de nuevo. No obstante, aquella recién estrenada afición, me empezó a tentar. Pocos días antes, y después de la operación, bastaron para mi toma de contacto con el mundo exterior Y empecé a vivir, como si fuera el primer día, con esta ventana al mundo, tan increíble, y tan fantástica.
No tardé demasiado tiempo en querer escribir algo, y sin saber lo que era un bloc, ni Bloguer, ni la globosfera, empecé por describir una estancia en el Valle de Aran. Al día siguiente ya me encontré con unas cuantos comentarios de mi entrada. Aquello, me hizo ver todo lo que nos brinda este particular mundo virtual, que me tiene completamente, cautivada.
Aquí me siento tan bien, he hecho tantos amigos, y ha creado en mí, tal adición, que he llegado a un punto que me planteo, la necesidad de controlarme, y no tomarlo tan en serio.
Iba buscando un medio para distraerme el los días aciagos de la operación y la convalecencia, y estoy completamente a merced, de las entradas, los comentarios, y demás. Todos vosotros amigos blogueros, que me habéis insuflado energía, distracción, mucha comprensión y humanidad, me habéis contagiado el gusanillo, de vuestras inquietudes.
Y me siento cobijada, escuchada, discutida y VIVA!!!!
...como adaptarse a los nuevos tiempos
Estábamos todas charlando amigablemente, muy felices ante la perspectiva de un nuevo curso, que vamos a compartir, y de pronto, me ha asombrado del tema que tan acaloradamente, discutíamos, y me ha venido en el pensamiento, una idea y la reflexión que podíamos hacer de la misma. Todas éramos mujeres maduras, con una media de edad de 63 años, gozando del reencuentro, mientras tomábamos un café.
Esperando mi turno de palabra, he pensado en como estábamos tan felices y absorbidas por completo; no por contar nuestras vacaciones y las vivencias del verano, sino que se discutía de los sistemas operativos de los ordenadores.
Madre mía! que cambio tan radical ha dado la sociedad. Un grupo de mujeres hablando de los sitsemas Windows- Vista, de los de Mac-book, y de los programas que se pueden añadir en uno y otro caso. Cambiando frases de contenido técnico, como si se tratara de las recetas de la abuela, o del nuevo limpia-todo salido al mercado recientemente.
No cabía en mi asombro, y así se lo he hecho, notar, y nos hemos reído un montón
Yo recuerdo no hace mucho, que los encuentros entre amigas, siempre era el hablar del mismo tema. La familia, la moda, la costura, la limpieza, la cocina y la suegra, por este orden mas o menos.
Pero hablar de archivos PDF, de Megabites, de Power-Points, del Software, del Hadware, cuentas de Mesenger, de Facebook, y de los, USB y de ADSL router, del Spotligt, del Time Machine, de Chad Theater, y de Bloguer, por citar algunos.
Esto no sé si es adelantar o retrasar el conocimiento personal, de cada uno, o si ayuda o no a desarrollar la inteligencia emocional, que también es muy importante. Porque, a ver si el leer nos hará perder la escritura. o viceversa. Que todo es posible en Granada.
Lo que sí es cierto, es que soplan nuevos y renovadores aires, que el machismo, va cediendo, poco a poco y que la tecnología o el arte llegan por igual, a todas las capas sociales, y a todas las edades. Están ahí, solo hay que alargar la mano.