EL RELOJ Y UNOS OLVIDOS.Antes de abordar el temea de esta semana, quisiera hacer mención de unos blogueros que olvidé la semana anterior, y aunque mi pinión sobre ellos, como sobre todos lo demás que he nombrados, no tienen nigún valor, solo he querido agrader su compañia, voy a reparar ese decuido si tu amiga Sindel me lo permites.
Charo: Espero que no me guardarás rencor querida.Tu sabes bien que no te olvido.
Maria del Carmen Nacer: Aprecio de veras todo su potencial creativo que es inmenso.
Ilesin: No se como me ha pasado, con lo que me gusta, haberme olvidado de ella.
Fanny Sinrima: una genial escrirtora y una comentarista que vale mucho.
Leonor: ¿Como te explicas que a tí también te haya obviado? Tan cercana que te siento!
Pakiba: tu también me has de diculpar, querida amiga. Una gran mujer.
Lois y Clark: los mas insignes periodistas de la red. Los quiero mucho.
Loquita : yo si que estoy loquita. Lo tuyo es una broma, comparando.
Lucia Escribano: Una blogera simpática, creativa y dulce. Se hace querer
El reloj para mí ha sido un instrumento de tortura. Me gusta ser puntual, de tenerlo todo en su punto y este es un handicap de los peores, malísimo: te hece estresar, no te deja dormir, porque siempre andas detrás de la hora. En pos del minutero... A todas horas corriendo, como si se escapara el trén o el avión, y de esta manera los que sufrimos esta prisa, así de rápido se nos acaba la vida. ¿que no he tenido horas buenas? pués sí y muchas!!! a Dios Gracias. Pero siento como si me hubieran durado poco. Y es cierto: lo bueno siempre se hace escaso, insuficiente y breve. Al contrario de los malos momentos, que se nos antojan largos, duraderos e interminables. Suerte que nos quedan los recuerdos y las fotos. Y al final de todo lo que permanecerá será El Reloj el famoso bolero de Lucho Gatica.
Fíjate que en lo primero que pensé yo al leerla palabra reloj, fue en Lucho Gatica y vas tú y me lo nombras.¡Que coincidencia!
ResponEliminaEl recordar tus olvidos es un detalle que te honra.
Un beso.
Siempre corriendo y siempre llegando tarde, me suena. Seguro que los nombrados hoy estarán contentos y a Sindel no le importarà y le encantará tu entrada. Un abrazo
ResponEliminaSiempre corriendo y siempre llegando tarde, me suena. Seguro que los nombrados hoy estarán contentos y a Sindel no le importarà y le encantará tu entrada. Un abrazo
ResponEliminaSomos esclavos de las horas, de la puntualidad. Siempre corriendo para que nos alcance el día y llegar a hacer todo. Y nunca nos alcanza el tiempo.
ResponEliminaPero así es la vida, al menos hasta que aprendamos a relajarnos y disfrutar más.
Un beso.
Uno siempre va contra el tiempo, contra el reloj.
ResponEliminaSiempre corriendo. Sindel tiene razon, no sabemos relajarnos.. Para mi es algo dificil
Un beso Montsérrat
Isa
El reloj el al tiempo como un buen novio y un amigo... Se parecen pero unos alteran y otros esperan.
ResponEliminaEs bueno que el tiempo corra, solo que no siempre lo hace a nuestro paso, más con el reloj tenemos la dicha de poder castigarlo contra la pared.
Un bezaso y un placer venir siempre.
Monserrat, gracias por tu visita, amiga...Nos dejas tu humildad reconociendo tus olvidos...Y ese reloj que unas veces va a nuestro lado y otras se escapa sin ton, ni són...Me encanta tu entrañable aportación.
ResponEliminaMi felicitación y mi abrazo de luz, amiga.
M.Jesús
A mi también me gusta la puntualidad aunque por aquí me resulta algo mas difícil ya sabes que las obligaciones son las primeras. Y como siempre hay que coger el tren y hoy intenté estar aquí de las primeras.
ResponEliminaUn beso dulce de seda.
Tus palabras me hacen mucho bién. Gracias y abrazos grandes.
ResponEliminaCierto Ester, Sindel me lo ha permitido, su cometnario se ha centrado en las prisas, y las corridas que hacemos a causa del reloj.
ResponEliminaGRacias y buenas noches,amga
Tienes razón Sindel: hemos de aprender a relajarnos, y dejar el reloj en paz. Yo lo vengo diciendo hace años pero...enfín que cada uno es como és.
ResponEliminaMuchos besitos y gracias!
Sí Isa Iss: Para mí también es algo dificil. Controlar el tiempo deberia de estar prohibido. GRacias por comentar. Recibe dos grandes besos
ResponElimina*: querida amiga: es verdad todo lo que dices. Pero lo que mas me ha gustado es la idea de castigar al reloj contra la paret. Jajajajaja!!!
ResponEliminaMuchas gracias por pasarte y salud
Maria Jesús Muñoz.he recibdo tus besos de luz. Muchas gracias por ello y por tus palabras, siempre tan amables.
ResponEliminaTe mando besos de niebla que es lo que tengo más a mano.
Maria Perlada: Si habitaras en cualqier pueblito de Austria o suiza, por ejemplo, no cogerias nunca un tren, porque allí van al segundo.
ResponEliminaUn beso de niebla espesita que es lo que tenemos en abundancia. Es molesta pero es tan romántica!!!
Sabes que me encanta leerte, la frescura de tus letras y tu naturalidad, me llenan. Es cierto: siempre vamos a contrarreloj.
ResponEliminaUn abrazo.
Mi querida Montserrat, no tienes que disculparte a veces todos llevamos demasiadas cosas enredadas y no es que no deseemos pasar y leer a quienes nos emocionan, lo que ocurre es que el tiempo nos apremia y no podemos atraparlo. Bello tu reloj.
ResponEliminaBesos
Hola Musa: Gracias de nuevo por tus agasajos.
ResponEliminate agradezco com se merecen tus palabras, y aprovecho para mandate un montón de besos y abrazos.
Cierto,Ilesin: andamos de cabeza, con tantos compromisos, y eventos que nos obligan a mirar el reloj, MÁS DE LO QUE FUERQA MEENSTER!!!
ResponEliminagRACIAS. UN BESITO