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dijous, 5 de febrer del 2015
HISTORIAS JUEVERAS
Según idea de LUCIA ESCRIBANO del blog "Sintiendo en la piel"
La novia era al reina de la fiesta, no habia duda alguna. Estaba preciosa con su vestido color beig de Armani, i brilló toda la velada como una estrella. Simpática y dicharachera, bailando con todos jóvenes y viejos.
No se cansaba de dar las gracias a todos por su presencia. Su marido no paraba de observarla. Pero lejos de mirarla con agrado y admiración por el éxito de la fiesta, i con aquel cariño y comprensión que siempre le demostró, parecia que conforme pasaban las horas, su cara denotaba más fastidio que cansancio Ella se dió perfecta cuenta y pensó que lo habia desatendido un poco. Fué a sacarlo a bailar pero al frildad de él la desarmó. Empezaba para ella una relación de celos que duró solamente unos pocos meses. Una mañana cogió las maletas y se fué dejándolo solo que se peleara con los muebles. Estaba harta de sus arranques y de sus crisis de celos, que eran insoportables. No queria pasar por el calvario, de un marido maltratador, que es como se acaba, con los celos
Siete meses después de aquel dia imborrable le envió el siguiente telegrama:
“Alejandro, vivo en Holanda, trabajo en un local donde exponen sus obras todo tipo de artistas noveles. Estoy aprendiendo mucho y soy feliz”.
Muy bien por abandonar a un celoso.
ResponEliminaSi, los conozco de muy peligrosos. Y l son hasta de sus hijos. Gracias por entrar y un saludo.
ResponEliminaOle por ella.
ResponEliminaYo no le hubiera escrito, pero si Lucia dice que hay que escribir pues ...
ResponEliminaUn abrazo
de los celos que no dejan vivir...hay que huir, sin dudarlo.
ResponEliminaTe saludo Montserrat, molts petons.
Muy bien por el valor que tuvo ella para abandonar a esa persona, los celos acaban con las relaciones. Yo no le habría dicho donde estoy.
ResponEliminaUn abrazo.
Bravo! Por esa novia que no quiso ver morir sus ilusiones al lado de un
ResponElimina¿ hombre ? Que no la merecia.
Imagino la cara de imbecil del marido cuando ella le paso por las narices que era feliz sin el.
Gracias por acompañarme, y no olvides recojer el recuerdo de este jueves en mi blog.
Besos amiga.
HOla TRAcy: Valiente si que fúé si...
ResponEliminaYO pienso que acertó. Gracias por comentar. Feiz fin de semana.
Ester: para tí hubiera sido mejor no decirle nada más , verdad?. Quizás... porqué así no tendría la tentación e ir a verla o a reconquistarla.
ResponEliminaGracias por el comentario i recibe como siempre un abrazo cálido y cariñoso.
Pues si, mejor dejar las cosas a tiempo, que no cuando sea demasiado tarde.
ResponEliminaUn abrazo
Anna Jorba: Soy de la misma opinión querida amiga. En estos casos hay que cortar por lo sano.
ResponEliminaUn abarazo y muchas gracais por entrar.
Hola Leonor: Veo que tu eres una mujer de fuertes convicciones, y que no te gusta correr riesgos.
ResponEliminaSeguro que es lo mejor.
Una abrazo y gracias por entrar.
Hola Lucia Escribano. Cierto. Una mujer gaupa y simpática nunca se merece un marido así. Y es que los celos son muy malos.
ResponEliminaGracias por ser tan buena conductora, y por todo tu tiempo.
UN beso.
Una mujer con arrojo, Has mostrado muy bien una situación dificil.
ResponEliminaUn abrazo Montserrat.
Lo dificil es eso: el momento de dejarlas cosas.
ResponEliminaUn beso
Pues creo que hizo lo que debía: vale más prevenir que lamentar.
ResponEliminaCarmen Andújar: Tu también eres una mujer práctica, pero con los sentimientos a veces estas decisiones cuestan de tomar.
ResponEliminaGracias por dejarme tu opinón..Te mando todo mi afecto que es mucho.
Un abrazo para tí amiga SAN. Y muchas gracias pro tus amables palabras.
ResponEliminaRecibe todo mi cariño
FAbián Madrid: Eso,eso és lo mas paliagudo. Pienso lo mismo que tú. Un saludo amigo. Gracias por venir a mi casa virtual.
ResponEliminaES cierto MªJesúus.Lo malo fué que la previsión llegó un poco tarde,¿No lo crees?.
ResponEliminaN fuerte abrazo.Gracias.
Pues lo mejor que pudo hacer, como bien dices, eso solo podría empeorar.
ResponEliminaBuen relato, amiga. Besos.
Hola Juan Corlos: LOs celos pueden traer problemas gordos y a veces pueden llegar a límites insospechados. Por eso pienso lo mismo que tú. Una abrazo y muchas gracias
ResponEliminaTierra de por medio, y un aviso desde la distancia que la vida sigue. A pesar de que uno se crea el centro del iniverso.
ResponEliminaBesos
Así es Alfrdo: Dices bien, en estos casos lo mejeor es poner tierra en medio.
ResponEliminaGRacias por entrar a comentar. BEsos
Pues hizo muy bien, por doloroso que le resultara abandonarlo los celos nunca acaban bien. Muy buena historia!
ResponEliminaGracias por tu opinión Charo que estimo en lo que vale siempre.
ResponEliminaUN abrazo grande amiga-
Los celos son una manifestación plena de desamor. Odio el tú eres mío/a y de nadie más. Hizo bien en poner distancia de por medio.
ResponEliminaUn fuerte abrazo.
La autoestima ante todo.
ResponEliminaGràcies.
Una abraçada.
Cuanta razón llevas Pepe. A mi tampoco me gusta esta manifiestión tan vulgar y hortera. "Tu eres mio y yo soy tuya"Denota muy poca cultura.
ResponEliminaGRacias por tu comentario. UN abrazo bién fresquito
Olga i Carles. Cierto amigos, la autoestimaes muy importante.Graciaa y os saludo muy cordialmente.
ResponEliminaHola Montserrat.
ResponEliminaUna mujer muy valiente la de tu relato.
T´envio molts petons desde Valencia, Montserrat
Hola tocaia: Debió de serlo, porquè
ResponEliminasi se casó enamorada, como es de suponer, menuda decepción y desengaño.
Gracias por pasarte. Un abrazo.