HISTORIAS JUEVERAS.
Maldita seas!!! mala! eres peor que un escorpión. Se lo voy a explicar todo a mi hijo y a mi noera.
La chica que procedia de un país tropical, se burlaba siempre de su ama que atada a una cama por una enfermedad que no la permitia andar y apenas moverse. Su hijo la visitaba cada semana, y se habia enamorado locamente de la chica que le hacia enloquecer con sus encantos físicos y por su caracter dulce y sumiso.
-- Mamá, es que te quejas por todo. Lucinda te hace la comida, lava i plancha la ropa. Además va al mercado. Qué más quieres? Yo veo que todo està muy limpio,. dicho esto, salia corriendo de la habitación detrás de la joven por si la encontraba en la cocina y se dejaba manosear o algo más. Entre quejidos y arrumacos, el la dejaba hacer lo que le venia en gana. La cuestión era seguir gozando de sus favores.
Poco a poco se hizo con el control de todo. Hasta le robaba dinero joyas y se ponia sus pieles.
La madre era inválida pero no tonta, y se daba cuenta de todo.Tenía que hacer algo.
Un domingo, mientras la forastera se habia ido, como siempre sin dejarla ni la comida, bajó de la cama y arrastrándose como pudo llegó al despacho de su difunto marido, en busca de una objeto que él tenia a buen recaudo. Este trabajo la ocupó bastantes horas, pero lo terminó a tiempo, y cuando ella llegó, fué a burlarse de la abuela,como de costumbre.
Maldita seas!!! mala! eres peor que un escorpión. Se lo voy a explicar todo a mi hijo y a mi noera.
La chica que procedia de un país tropical, se burlaba siempre de su ama que atada a una cama por una enfermedad que no la permitia andar y apenas moverse. Su hijo la visitaba cada semana, y se habia enamorado locamente de la chica que le hacia enloquecer con sus encantos físicos y por su caracter dulce y sumiso.
-- Mamá, es que te quejas por todo. Lucinda te hace la comida, lava i plancha la ropa. Además va al mercado. Qué más quieres? Yo veo que todo està muy limpio,. dicho esto, salia corriendo de la habitación detrás de la joven por si la encontraba en la cocina y se dejaba manosear o algo más. Entre quejidos y arrumacos, el la dejaba hacer lo que le venia en gana. La cuestión era seguir gozando de sus favores.
Poco a poco se hizo con el control de todo. Hasta le robaba dinero joyas y se ponia sus pieles.
La madre era inválida pero no tonta, y se daba cuenta de todo.Tenía que hacer algo.
Un domingo, mientras la forastera se habia ido, como siempre sin dejarla ni la comida, bajó de la cama y arrastrándose como pudo llegó al despacho de su difunto marido, en busca de una objeto que él tenia a buen recaudo. Este trabajo la ocupó bastantes horas, pero lo terminó a tiempo, y cuando ella llegó, fué a burlarse de la abuela,como de costumbre.
-- Qué vieja bruja, que tal el día? Debes de encotrarte con el estómago muy lleno.
-- ¿Verdad?, pues yo he ido a un restaurante y me he puesto las botas de comida y de bebida... y ¿sabes qué? Lo has pagado todo tu, jajaja!!!
La anciana con calma y serenidad, y sacando la mano de dentro de la sábana, le dijo:
-- Pués ahí va el postre: Pam, Pam, Como la tenia delante mismo, no erró la descarga.
-- ¿Verdad?, pues yo he ido a un restaurante y me he puesto las botas de comida y de bebida... y ¿sabes qué? Lo has pagado todo tu, jajaja!!!
La anciana con calma y serenidad, y sacando la mano de dentro de la sábana, le dijo:
-- Pués ahí va el postre: Pam, Pam, Como la tenia delante mismo, no erró la descarga.
Qué relato!!! al final (y al comienzo) tomas partido por la pobre mujer que es víctima de tamañas afrentas y maldades.
ResponEliminaNo hay enemigo chico...
besos jueverísimos
Vaya, pobre señora, lo bueno que se desquitó de la chica. Me ha gustado el relato =)
ResponEliminaQué fuerte!, llegar al límite y tomar la decisión debe ser muy difícil, excelente relato, no esperaba ese final.
ResponEliminaUn beso.
sorpresivo y simpático relato ¡saludos amiga Monserrat!!!
ResponElimina¿Un relato con final feliz? Yo creo que si
ResponEliminaLa venganza suele ser tan cruento como el daño recibido.
ResponElimina=(
Desde luego nunca más la maltrataría. La pobre mujer se veía tan indefensa, que al final no pudo más.
ResponEliminaMuy buen final
Un abrazo
Casss: Si la historia fuera cierta, -que no lo és- seguro que me posicionaria a favor de la anciana,porque tan comi iban las cosas,no le quedava otro remedio.
ResponEliminaGracias por tu estupendo comentario.
Un beso.
Azulia: Gracias por darme tu opinión, que aprecio mucho y que creo sincera.
ResponEliminaFeliz dia.
Ame, si que es cierto que debe ser muy fuerte tener que tomar una decisión como la que tomó la viejecita.Pero existen casos como este de graves por maltrato a los abuelos.
ResponEliminaSaludos y gracias
Hola Lao: sorpresivo si que lo és, pero simpático,permíteme que lo dude.
ResponEliminaDe todas maneras gracias por opinar.
Besos.
Jajaja!!! qué buena que eres Ester. A mi por lo menos me lo parece.
ResponEliminaGracias por pasarte, amiga. Cariños.
Y al hijo, culpable por consentir, ¿qué le hará la anciana?.
ResponEliminaq121º
ResponEliminaNeo. estas cosas no son venganzas,ni ajustes de cuentas o cosas por el estilo. Estas situaciones que ves claro que no tienen remedio, hacen enloquecer a la persona que sufre la afrenta y actua así por necesidad.
ResponEliminaSabe queno tiene otra salida y hace lo que no habria pensado en su vida.
Gracias por tu visita, amiga.
Saludos
Lo del hijo, aunque es exagerado está dentro de lo que se puede esperar de un hijo, que se vuelve loco por las faldas. Tampoco es que me parezca bién,pero estos abundan.
ResponEliminaGracias y hasta otra ocasión.
Tan ciego el hombre, y tan mala la empleada! El dúo perfecto para darle tan mala vida a la pobre anciana.
ResponEliminaY al final todos sus pecados fueron castigados, aunque no es la manera, esta vez me alegro de que se haya hecho justicia.
Un beso.
Asi és amiga Sindel: Un buen tandem. Yo también me
ResponEliminaalegro que se hiiciera justicia. Aunque estoy completamente en contra de toda violencia.
Muchos besos y gracias.
Dios nos libre de semejante ayuda. Un beso
ResponEliminaDe verdad Charo: que Dios las guarde lejos de nosotros.
ResponEliminaGracias por entrar y comentar.
Un beso carioso.
Maria Jose, diculpa el error. Te he confundido con nuestra amiga Charo.
ResponEliminaSe perfectamente quién eres tú.
la escritora que presentó este año en Madrid, un libro, queno recuerdo el título, pero si que te comenté, que estabas muy guapa ese dia. Recuerdas?? Un abrazo.
Al final, un poco de justicia...drástica, pero justicia al fin y al cabo...
ResponEliminaDe todos modos pone el acento en un problema de fondo muy grave y de calado...
besos y abrazos
Gracias por tus palabras Max Estrella
ResponEliminaSi, es cierto que existen grandes problemas de fondo,con los ancianos y sus cuidores.
Saludos entrañables.